SUBASTA PRESENCIAL 10 DE ABRIL 2024 - 1ª SESIÓN - ARTE ASIÁTICO
Figura tallada de jade verde espinaca "Buda en la gruta", dinastía Qing
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Figura de jade tallado en una sola pieza, de intenso color verde espinaca, con ligeras manchas de tonalidad pardo.
La magnífica talla realizada con gran maestría, muestra, en el centro, al Buda de la vida inconmensurable “无量寿佛”representado en posición bhumisparsha mudra, con la mano derecha extendida sobre la rodilla y la mano izquierda descansando con la palma hacia arriba a la altura del abdomen, sosteniendo un pequeño templo o altar. Su expresión es de completa serenidad, con los ojos entrecerrados que miran hacia abajo y la boca ligeramente entreabierta. La cabeza se encuentra cubierta por una corona de cinco hojas de loto, que posee una parte inferior que cubre la nuca y las alargadas orejas. Una túnica tallada con gran detalle cubre el cuerpo hasta la altura de los pies, donde los múltiples pliegues son realizados con gran calidad y muestran la caída natural del tejido. Las piernas se muestran flexionadas, pero en diferente posición; la derecha, reposa el pie descalzo sobre el suelo, mostrando los delicados dedos, mientras que la izquierda se inclina hacia adentro, exhibiendo así la plante del pie y recordando ligeramente a la clásica posición de loto.
La figura del Buda se encuentra enmarcada por una gruta de interior hueco, realizada con gran detalle. La orientación de esta es vertical, y finaliza en una ligera curva. Con gran maestría, ha sido tallado el jade en todas sus caras, representando fielmente la complicada estructura de las rocas: escarpadas, caladas y angulosas, de entre las cuales florecen diversos motivos vegetales como pequeñas ramas de ruyi, finos bambús, hojas de sauce que descienden, un floreciente crisantemo e incluso, un pequeño árbol que emerge de la propia piedra en el ángulo superior derecho.
Destaca en la pieza, la minuciosidad de los detalles y el elaborado trabajo del tallado de la piedra, lo que dota de vida a la escultura y refleja fielmente la serenidad y solemnidad de la escena. Así mismo, es destacable la pátina que cubre completamente la pieza y que denota su innegable antigüedad.
El Buda de la Vida Inconmensurable “无量寿佛”es el primero y más destacable en términos de poder y luz, pues representa la vida y luz infinitas. “无量寿佛”ilumina a aquellos seres solitarios para aliviar así sus sufrimientos y obstáculos kármicos y tras su muerte les ofrece el renacimiento en su Tierra Pura, donde serán bendecidos con paz y felicidad.
Durante la dinastía Qing, en el periodo Qianlong, el jade fue extensamente empleado por emperadores y miembros de la nobleza debido a la expansión territorial de la corte Qing en China occidental, lo que incrementó su suministro; así mismo, es conocida la afición del Emperador por el uso de este material, y el cual seleccionaba minuciosamente a los mejores maestros de jade para realizar sus encargos. Así mimo, la dinastía Qing era reconocida por su gran devoción y creencias budistas; según los archivos reales de la oficina del palacio, los emperadores solicitaban la producción de diversos objetos y obras de arte, destinados a adorar a Buda, empleando los mejores y más selectos materiales como el jade, el oro o la laca. Dinastía Qing (644-1912).
Medidas: 24,5 x 7 x 16,5 cm
Peso: 3.390 gr
Procedencia: Almirante Giscaulime, perteneciente a las fuerzas expedicionarias francesas en China, s.XIX (1860).
• Actual colección privada francesa, obtenida directamente del anterior y único propietario.
Referencias:
· Sotheby's, Londres (17/12/1996), Lote 275.